Cómo preparar la mochila de montaña

Hace unas semanas os hablábamos de la importancia de elegir adecuadamente una mochila para salir a la montaña. Hoy queremos extender el tema hablando de cómo preparar una mochila.

A modo recordatorio, lo primero que tenéis que hacer antes de empezar a echar cosas a la mochila es elegir la mochila adecuada. Seguro que tenéis unas cuantas mochilas en vuestras casas, de mayor o menor capacidad. La elección de una u otra dependerá de la actividad, consultad nuestra entrada sobre cómo elegir una mochila de montaña para saber cuál es la idónea.

¿Cómo distribuir el contenido de una mochila?

Lo más importante a la hora de preparar una mochila es conseguir que la carga esté bien distribuida y equilibrada. La mochila debe ir ajustada al tronco y contener el material más pesado en el cuerpo central para garantizar que el centro de gravedad se encuentra pegado a la espalada. Además, a izquierda y derecha debe soportar el mismo peso para evitar descompensaciones al caminar y que se sobrecarguen unos músculos más que otros.

A la hora de colocar el material dentro de la mochila debéis tener en cuenta:

• Parte inferior del cuerpo central (o compartimento inferior independiente si lo tuviese): colocar aquí el material más ligero y de mucho volumen que menos se vaya a utilizar durante la marcha (saco de dormir, ropa de muda, ropa sucia, zapatillas...).

• Centro del cuerpo central (lo más pegado a la espalda posible): material más pesado (tienda de campaña, latas de comida, cuerdas...).

• Parte superior (seta): objetos poco pesados y muy utilizados (GPS, gafas, botiquín, documentación, brújula, móvil...).

• Bolsillos laterales: objetos más pequeños que quieras tener a mano (impermeables, objetos varios...). Se debe seguir con la idea de equilibrar un lado y otro de la mochila y, al ser bolsillos de fácil acceso, hay que tener cuidado ante posibles robos.

• Bolsillo de mapas: algunas mochilas tienen un compartimento especial para guardar mapas, si vuestra mochila no cuenta con él, guardadlo en un lugar accesible.

• Sistema de hidratación: algunas mochilas cuentan con un bolsillo interior para transportar camellbacks, si vuestra mochila no cuenta con él, llevadla siempre fuera, accesible y en posición vertical.

No es recomendamos colgar objetos fuera de la mochila porque os podrían desequilibrar, molestar en la marcha por pasos estrechos y podríais perderlos. Por otro lado, os aconsejamos que organizar los objetos pequeños en bolsas de plástico para tenerlas más organizadas, aisladas y visibles.